¿Cuántos de nosotros hemos soñado con tener ese fiel amigo que nos acompaña a todos lados?

¿Cuántos fuímos los que de pequeños les pedimos a los papás una mascota, un perrito o un gatito y se negaban porque decían que era mucha responsabilidad y trabajo?

Sí, es una responsabilidad, pero vale la pena y os explicamos por qué.

Un estudio demuestra que las personas que tienen una mascota, o varias, son más felices y están más sanos. Se trata de una investigación realizada por la Universidad de Azuba (Japón) que señala que los propietarios de mascotas poseen una autoestima mayor, que son más aptos físicamente y que tienden a ser menos solitarios y temerosos, además de ser más extrovertidos.

El equipo de investigadores que ha participado en este estudio ha concluido que los animales de compañía tienen muchos beneficios para los humanos. No sólo psicológicos, también físicos, además de ser un apoyo social para los dueños.

En el listado de cosas buenas que nos brindan estas mascotas nos encontramos con:

  • Aportan una mayor felicidad a nuestras vidas debido al cariño que nos tienen.
  • Reducen los niveles de estrés, ya que las caricias y los mimos son una fuente de bienestar para los humanos. Esto es debido a la oxitocina, la conocida “hormona del amor” que disminuye el estrés, la depresión y tiene influencia en la formación de vínculos interpersonales.
  • Aumentan nuestra motivación para realizar ejercicio físico. Pasear y jugar con los animales a diario nos ayuda a lograr el nivel recomendable de actividad diaria, movernos y llevar una vida diaria más activa.
  • Provocan una disminución de la presión arterial, ya que se reduce el nerviosismo y el estrés, así como aumenta la práctica de actividad física.
  • Ayudan a fortalecer nuestros sistema inmunológico. Un estudio realizado en Finlandia determinó que quienes conviven desde temprana edad con una mascota pueden reducir el riesgo de desarrollar alergias, enfermedades respiratorias, entre otros.
  • Reducción del riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, por el aumento de actividad física al cuidar de nuestras mascotas. Tenemos la responsabilidad de jugar con ellos y sacarlos a pasear para que respiren al aire libre y jueguen con otros animales.
  • Incrementan nuestras posibilidades de sobrevivir después de sufrir un ataque cardíaco.
  • Hacen que seamos más sociales. Pasear un perro no sólo contribuye a que realices más ejercicio físico, sino también incrementa la vida social. Tener una mascota hace que relaciones más con otros dueños e interactúes con ellos.
  • Elevan nuestra autoestima, ya que nos dan afecto, nos acompañan y hacen que nos sintamos queridos.
  • En casos de familias, los niños que crecen con mascotas tienden a ser más responsables, disciplinados, compasivos, cooperantes y generosos. Si se trata de niños que padecen algún tipo de trastorno emocional (autismo, trastornos de comportamiento, problemas del corazón…), en este caso, los animales hacen que sea más fácil su aprendizaje e incrementan su autoestima.
    Por este motivo, cada vez se utiliza más la denominada terapia asistida que se trata de la participación de mascotas en intervenciones terapéuticas.

En resumen, si aún no tienes mascota y te hemos impulsado a adoptar a un perro o un gato, o cualquier otra mascota, recuerda que te aportarán muchos beneficios y te darán compañía, aunque a cambio tienes que cuidarlos con mucho respeto y amor.

Vía https://www.elrincondelaspequenassonrisas.es